domingo, 13 de febrero de 2011

Reestreno VOLVER AL FUTURO

Parecía que jamás ocurriría, pero sucedió: Volver al futuro se reestrenó en los cines argentinos.
Ya se habló mucho de las campañas en Internet, de la iniciativa de Chandler, responsable del site Cinesargentinos.com.ar; se habló del auto que puso en juego... En fin, pueden leer todo cliqueando aquí.
Y más se habló todavía de la película, de su status de clásico, etc.
Lo que sí haré es contar cómo fue mi experiencia de disfrutar Vaf en cines, cosa que nunca había ocurrido. Sí llegué a ver la 2 y la 3 en pantalla grande, pero me faltaba la uno. La mejor.

La sala elegida fue una de Showcase Belgrano, en la función de las 00:55 hs., del sábado 15 de enero (bah, ya era domingo 16, pero no importa).
Pero cuatro horas antes me encontré con Luciana, una amiga. Y un momento antes de eso, retiré las entradas que había sacado para ambos.
Dimos una vuelta por el barrio chino de por ahí cerca. No conocía esa parte del mundo, así que fue una buena oportunidad para recorrer esas calles y sentir que caminaba por tierras orientales. Comimos unos deliciosos arrolladitos vegetarianos y chau fan (Luciana no come carne, y la comida china es deliciosa), todo acompañado por una Stella Artois de litro y medio. Luego fuimos a tomar helado, café...
Sí, sí, lo sé, están esperando leer lo relacionado con la peli. Sólo quería enmarcar la situación, je.
Luciana y yo ingresamos a la Sala 9 del Showcase, unos quince minutos antes de la proyección. Mientras bebíamos café pudimos ver al gentío que salía de la función anterior (por ahí andaba el periodista deportivo Gastón Recondo).
Mucha gente, como era de esperarse. Y también hubo cantidad en la función que nos tocó. Grupos de amigos y parejas, principalmente de nuestra generación, seguían entrando con baldes de pochoclo, gaseosas y ganas de pasarla de puta madre.
Empezó puntual. Bah, me imagino que así fue, porque apenas apareció en la pantalla el viejo logo de Universal me sumergí en la película. La disfruté como la primera vez, como quien redescubre un tesoro perdido, como si nunca la hubiera visto ni siquiera por televisión. La copia era en digital, pero parecía fílmico. Temía ver algo en calidad de DVD, pero nada que ver, por suerte. Los opening credits, Marty McFly, Huey Lewis, “The Power of Love”, Doc Brown, el DeLorean… ¡Todo eso y más en pantalla grande ¡Estaba viendo Volver al futuro en el cine! Al igual que en cada obra maestra (sea en materia de cine o no), cuando la ves de nuevo le encontrás nuevos detalles que justifican su genialidad. Robert Zemeckis y su equipo técnico y artístico hicieron algo más que un gran film: le dieron al mundo una interminable, insuperable e indispensable gema pop. El equilibrio perfecto de historia, personajes y poderío visual. Uno de los más logrados matrimonios entre arte y entretenimiento.
Comprendo que semejante cantidad de adjetivos y frases grandilocuentes y lugares comunes pueden resultar cansadores. Quien piense de esa manera nunca vio Volver al futuro ni en cines ni en ninguna parte.
A la salida, rumbo a la Avenida Cabildo, Luciana y yo no parábamos de hablar sobre la peli. Por supuesto, ella ya la había visto, pero acababa de sentir lo mismo que yo. De hecho, aun resonaba en mi cabeza la banda sonora a cargo de Alan Silvestri. “Dan ganas de quedarse viendo la 2 y la 3”, agregó Luciana.
Sí, fue una de las más experiencias cinematográficas más memorables que elegí vivir.

Ah: no pude con mi genio y saqué algunas fotos con la cámara del celular. Sólo algunas, ya que no quería perderme de Marty y sus andanzas temporales. Comparto algunas.


1 comentario:

Mirna dijo...

Una de las mejores películas de la historia. La vi en Showcase cine cuando la reestrenaron y quede encantada, fuimos con un grupo grande amigas porque era un acontecimiento importante verla en pantalla grande. Espero que la reestrenen algún dia.