viernes, 22 de enero de 2010

Glee


Simplemente para decir que me encanta. Tenía ganas de ver una High School Musical realista, con personajes patéticos pero muy humanos e imposibles de no querer.

Data completa de esta gran serie, pinchando aquí.

Los dejo con el número musical del primer programa, "Don't stop believing", que representa el espíritu de Glee.


miércoles, 20 de enero de 2010

Top 15 cine de terror 2000


Terminó la primera década del siglo XXI. Una década a puro terror, miedo, desesperación, incertidumbre. Diez años plagados de imágenes perturbadoras y de criaturas horripilantes, insaciables, dispuestos a gozar sobre nuestras entrañas y huesos o lo que quede de nosotros. Bestias imparables... a pesar de seguir siendo seres humanos.
Algo parecido sucedió en el cine.
Siempre dije que cuando me metiera a escribir sobre películas de terror directamente lo haría en un libro o crearía una página web dedicada a eso. Pero se me ocurre una breve síntesis de lo que todavía es un proyecto a futuro.
Retomando, en materia de género de terror, cada década tuvo lo suyo: los ’30, los monstruos de la Universal; los ’40, algo más de universal, pero mucho susto implícito en las obras producidas por Val Lewton, como La marca de la pantera; los 50, terror combinado con elementos de ciencia-ficción (El enigma de otro mundo). En los ’60, el horror gótico made in Hammer, y también la American International Pictures gracias el tridente Corman-Poe-Price, al mismo tiempo que George A. Romero sorprendía con La noche de los muertos vivos. Los ’70 nos dieron obras más crudas y violentas —El loco de la motosierra, La colina de los ojos malditos—, la piedra fundacional del cine slasher —Noche de Brujas—, las travesuras de Mario Bava y Darío Argento en la tierra de las pastas, las primeras adaptaciones de novelas de Stephen King —Carrie—, los experimentos de David Cronenberg en su Canadá natal, los aullidos de Paul Naschy en la Península Ibérica... y El exorcista, seguramente el film más aterrador de todos los tiempos. Los ’80 vinieron más fuertes y más delirantes también, a veces mezclando el humor negro con el terror; hubo más Stephen King en la pantalla grande, y se consagraron figuras como Romero, Cronenberg, John Carpenter, Sam Raimi, Stuart Gordon y Wes Craven, quien supo parir a su Freddy Krueger en su Pesadilla en lo profundo de la noche... y no nos olvidemos del grossísimo Clive Barker y su Hellraiser: el pacto. Los ’90 pueden considerarse como la Edad Oscura del género, ya que se produjo poco y muchas veces directo a video, pero es posible rescatar dos joyitas: En la boca del miedo, de Carpenter, y Candyman: el dominio de la mente. (No, El silencio de los inocentes no es terror, El proyecto Blair Witch nunca me gustó y la saga de Scream sólo le dio un toque irónico al asunto. Ojo, Sé lo que hicieron el verano pasado estaba bien, sobre todo por el lado de Jennifer Love Hewitt).
La llegada del nuevo milenio significó el regreso del cine de terror, y a través de dos corrientes definidas. Por un lado, las provenientes de Asia, basadas en fantasmas y sugestión. Por otro lado, los excesos crudos y realistas, que hicieron que ver una de miedo volviera a ser una experiencia perturbadora. Mucho tuvo que ver la situación de Estados Unidos, empezando por el atentado contra las Torres Gemelas y la guerra en Irak. Como sucedió luego de la Guerra de Vietnam en los ‘60 y ‘70, que provocó la realización de film más sangrientos y pesimistas. Además, mucho de lo más interesante del género provino de otros países: Japón, Francia, España, Inglaterra, Australia... ¡Hasta de Argentina! La situación política, social y económica de dichas naciones tampoco fue la ideal.
En Hollywood se dedicaron mayormente a hacer remakes de clásicos de los ’70 y ‘80. Hay que admitir que algunas están a la altura y hasta superan a la original.
Surgieron nuevas luminarias: Rob Zombie, Alexandre Aja, Eli Roth, Neil Marshall, Adrián García Bogliano,

Consideré hacer un Top Ten de las películas de terror de la década que se nos fue, pero consideré que era poco. Luego pensé que lo adecuado sería un Top 13, pero admito que soy supersticioso. Así que lo dejé en un Top 15, que ahí va:


1-La llamada (The Ring, Gore Verbinsky, 2002): Coincido con Marcelo, mi mentor, cuando decía: “Ringu (la original japonesa) es un borrador. La llamada es la versión definitiva de la historia”. Una de las mejores películas de terror surgidas del corazón de Hollywood, a la par de El bebé de Rosemary, La profecía y El exorcista.

2-Martyrs (Pascal Laugier, 2008): La representante del más visceral horror francés. Los detalles del por qué, en la nota ya posteada.

3-Exterminio (28 days later, Danny Boyle, 2002): El gran director Danny Boyle y el no menos talentoso guionista Alex Garland fueron los responsables del renacimiento del cine de zombies hambrientos. Esta peli podría haber encabezado la lista si no empezaba a sonar música cuando Jim (Cillian Murphy) sale a la calle y encuentra una Londres vacía y grita “¡Hola!” sin respuesta. Una secuencia, muy buena, que podía haber sido excelente. Pero el resto del film, tremendo.

4-El juego del miedo (Saw, James Wan, 2004): Podríamos decir que es la película de terror más novedosa hecha en Estados Unidos... pero el director y el guionista/actor Leigh Wannell son australianos. Una desgarradora experiencia, que influyó en el cine sangriento de años posteriores. Dio pie a innumerables secuelas, y seguimos contando.

5-Destino final (Final destination, James Wong, 2000): Sin dudas, la película de terror 100% estadounidense más original estrenada desde que arrancó el milenio (bueno, James Wong nació en Hong Kong y recién piso tierra yanqui a los 10 años, pero es prácticamente norteamericano). La secuencia del inicio no dan ganas de viajar en avión. Originó tres secuelas que repiten la premisa (personas que sobreviven a una tragedia, pero la Parca va por ellos).

6-Fiebre en la cabaña (Cavin fever, Eli Roth, 2001): Con su ópera prima, Eli Roth dejó en claro que iba a ser una década con más sangre y tetas. Una historia de horror sin monstruos pero repleta de cosas horrendas y conductas homicidas, además de elementos trash muy bien puestos. Roth no logró superarla ni con Hostel ni con Hostel 2, que siguen siendo angustiantes.

7-El amanecer de los muertos (Dawn of the dead, Zack Snyder, 2004): Una prueba de que la nueva versión puede estar a la par del clásico en el que se basa (en este caso, Muertos vivos: la batalla final, de Romero). Zack Snyder, que hace su debut con esta película, demuestra que sería uno de los grandes cineastas del nuevo milenio.

8-El despertar del Diablo (The hills have eyes, Alexandre Aja, 2006): Otra remake (en este caso, de La colina de los ojos malditos, de Wes Craven) que está a la altura de la original. Y por momentos la supera. ¿Por qué? Rubi, la única chica buena del clan de caníbales que acecha a una familia tipo norteamericana, en esta versión no habla y en la otra sí, y bastante. Alexandre Aja 1, Wes Craven 0.

9-REC (Jaume Balagueró/Paco Plaza, 2007): Los realizadores más importantes del fantástico español aunaron fuerzas para darnos una de zombies antropófagos, pero filmada con un estilo Blair Witch. Una experiencia infernal. Dio pie a una secuela, REC 2, que no está mal.

10-La niebla (The Mist, Frank Darabont, 2007): Basada en una novela de Stephen King. Terror clásico con final devastador. La nota completa, aquí.

11-30 días de noche (30 days on night, David Slade, 2007): Salvado la joyita sueca Criatura de la noche (que en realidad es más una siniestra fábula), 30 días... es la mejor película de vampiros de la década. Pocas veces vimos chupasangres tan feroces. Y también, sin querer queriendo, es un gran homenaje a Romero y a Carpenter.

12-Dog soldiers (Neil Marshall, 2002): Los hombres lobos también dijeron presente en estos diez años. Esta historia acerca de soldados ingleses acechados por licántropos en un bosque de Escocia se convirtió en una de las mejores del subgénero de estos últimos años. Estupendos homenajes a La noche de los muertos vivos, Depredador y Aullidos (aunque el director dijo que su mayor fuente de inspiración fue Zulu, aquel film de 1964 con Michael Caine). Imperdible el chiste relacionado con el fútbol. Unos años más acá, Neil Marshall volvió a aterrizarnos con El descenso (también da para chistes sobre fútbol).

13-36 pasos (Adrián García Bogliano, 2006): ¡Argentina presente! La productora Paura Flics no para de darnos obras de terror puro y duro. 36 pasos se destaca por sus toques de originalidad: las protagonistas deben convivir en una quinta, andar ligeras de ropa y pasarla genial... si es que no quieren morir (¡¿?!). Que sigan los éxitos para Adrián García Bogliano y compañía.

14-Violencia diabólica (The devil’s reject, Rob Zombie, 2005): Luego de una gran carrera como músico, Rob Zombie filmó una película, y del género de sus amores (no, una comedia romántica no): Mil Cuerpos, una suerte de homenaje a El loco de la motosierra, pero que va más lejos aún. Su continuación, Violencia diabólica, la supera en originalidad, ya que se trata de una road movie enfermiza, en la que el perseguidor de la familia de asesinos es más brutal que todos ellos. Rob Z. También hizo las cosas muy bien en su remake de Halloween: el comienzo y la secuela, Halloween 2.

15-El cazador de Wolf Creek (Wolf Creek, Greg McLean, 2005): Como puede comprobarse en el imperdible documental Not quite Hollywood: the wild, untold story of Ozploitation, Australia tiene una importante tradición en cuanto al cine de género. El cazador... demuestra que esa tradición sigue viva. Y como si fuera poco, nos presenta a una versión tenebrosa del gran héroe australiano: Cocodrilo Dundee.

También vale destacar a pequeñas joyitas como la inglesa Eden Lake, las estadounidenses Jeepers Creepers y Cloverfield: Monstruo (que casi entra en el Top 15 en lugar de REC, pero había que poner un representante de la Madre Patria). Por el lado de los países asiáticos también vale mencionar a El ojo, de los hermanos Pang; El grito (la original y la remake) y Dark water. También el regreso de Romero —sobre todo El diario de los muertos— y de Carpenter, pero en la televisión mediante la enorme serie Maestros del horror, también comentada aquí.
Veremos qué nos depara esta década. Sólo esperemos que el horror esté en la pantalla, no en la vida real.

domingo, 17 de enero de 2010

Martyrs


Una versión anterior del siguiente texto iba a ser incluida en el inminente Top 15 de películas de terror, pero bien vale un post separado para poder desarrollar un montón de puntos.

En la primera década del siglo XXI, los franceses fueron los responsables máximos de que volver a ver una película de terror fuera una experiencia perturbadora. Films crudos, directos, sin chistes ni estupideces, como los que se hacían en los ’70 y parte de los ‘80 (Recuerden que veníamos de los noventa, con su terror irónico y apto para más chicos gracias a la saga de Scream). Es cierto que estos directores confesaron haberse criado con las obras de realizadores como John Carpenter, George A, Romero, Wes Craven, Darío Argento y Tobe Hooper. Pero también debió influir la situación política y social de Francia, sobre todo en los ghettos, donde predominan inmigrantes ilegales mayormente provenientes de países africanos. Así lo refleja de manera excelente El odio, de Mathieu Kassovitz.

Volviendo al nuevo cine de miedo galo, el Daniel Boone del asunto fue Alexandre Aja, con su Alta tensión. Le siguieron La frontera del miedo, de Xavier Gens; Inside: la venganza, ya reseñada en el blog (para leer la nota, pinchen aquí), por nombrar los ejemplos más destacados.

Por varios motivos, Martyrs (2008) está por encima del resto. Su ferocidad es tal que en Argentina todavía no se estrenó ni en cines ni en DVD.

Es verdad, que, al igual que las películas mencionadas, las protagonistas son mujeres (y no damitas asustadas, sino hembras fuertes, con carácter, que deben aprender a sobrevivir). Sin embargo, no tiene un final tramposo como Alta tensión. No hay estilo videoclipero ni elementos políticos ni está tan anclada a la fuente de inspiración (The Texas chainsaw massacre, aquí conocida como El loco de la motosierra) como La Frontera... No es tan gratuita como Inside.

Además, el guión. Tiene una historia oscura, desafiante, con inesperadas vueltas de tuerca, al punto que por momentos parecen varias películas en una.

¿De qué se trata Martyrs? No sería conveniente contar demasiado del argumento. Bueno, sólo el comienzo. Una niña golpeada y ensangrentada escapa gritando de matadero abandonado. Lucie (tal es su nombre) no recuerda qué le pasó. Su destino: una institución especial, donde, a pesar de su estado de perturbación, entablará amistad con Anna, una nena de su edad. Corte a 15 años después... Y contar más sería imperdonable. Sólo puedo decir que las situaciones, imágenes y personajes que irán apareciendo podrán a prueba hasta al espectador que se creía curado de espanto.

(Mientras escribo estas líneas, gatos maúllan en el patio, con intenciones de aparearse. Suenan como chiquitos agonizando, pidiendo ayuda. No puedo contener el escalofrío).

El director Pascal Laugier no venía de hacer un suceso: El internado, su ópera prima, contaba una historia de fantasmas ambientado ya saben dónde. A pesar de tener como protagonista a Virgine Ledoyen (la chica que conquistaba a Leonardo DiCaprio en la fallida La playa), el film no llamó la atención de casi nadie. Por eso Pascal se propuso hacer una película que desde el vamos saliera a patear encías.

El rodaje de Martyrs se llevó a cabo en Montreal, Canadá, y muchos de los involucrados sabían que el asunto era tan salvaje que podría salir directamente en DVD. Pero el éxito en festivales como Cannes, Toronto y Sitges posibilitaron el estreno comercial. Por supuesto, hubo quienes la amaron y quienes la odiaron. Pero siempre llamó la atención.

Contento con el suceso de su flamante criatura, Monsieur Laugier (quien confesó haberse inspirado en el concepto del sufrimiento que tenía George Bataille) se despachó con el siguiente comentario: “El cine lleva mucho tiempo muerto. Si nos referimos a los valores humanos que se supone que encarnan las películas populares, en su mayor parte me parece que son más brutales, cínicas y violentas que las películas de género”.

Hollywood vio con buen ojo al director y lo convocó para dirigir la remake de Hellraiser: el pacto, obra maestra de Clive Barker. Para el treintañero Pascal era el sueño de su vida, pero sabía que era preciso andar con cautela. De hecho, los productores de este nuevo refrito venían de rechazar un guión de la dupla Julien Maury-Alexandre Bustillo, culpables de Inside. Pero P. L. se la bancó y comenzó a escribir un guión que, sin bien no sería una reproducción del primer Hellraiser, respetaría su esencia: “Quiero hacer una película fresca con muchas cosas sorprendentes e inesperadas. Y al mismo tiempo quiero que esté conectada con el material original”, dijo en una entrevista para la página Ain’t it Cool News. Y agregó: “Vamos a tener la oportunidad de tener un presupuesto aún mayor que el que Clive tuvo en la primera película, así que será por supuesto más épico, más grande, y espero que no sea más suave. Y ahora mismo confío en los chicos de Dimension Films Es todo cuestión de relaciones interpersonales. Hablo mucho con Bob Weinstein, él se preocupa por los proyectos, es un cinéfago, y sabe mucho sobre cine. Pero al mismo tiempo Bob es un hombre de negocios muy realista. Así que habrá batallas, y espero que encontremos un equilibrio y la película se acerque a mi visión. ¿Qué puedo decir? No estoy seguro. No puedo firmar con sangre que lo vaya a conseguir…”.

Hasta el mismísimo Clive Barker, fanático de Martyrs, le dio su bendición.

Pero lamentablemente su enfoque de Hellraiser no convenció a Dimension Films y debió salir del proyecto, que sigue en el limbo (¿por suerte?). Menos mal que antes de involucrarse supo decir: “Hollywood es como una mujer bellísima pero que tiene un cuchillo escondido en su espalda. Quieres acostarte con ella pero puedes acabar degollado”.

Pero no fue para tanto. Ahora prepara Details, su siguiente opus. Ojalá sea tan impactante y despiadada como Martyrs, film que deben ver. Si se atreven.

lunes, 11 de enero de 2010

La Cosa, verano '10


En este número veraniego de La Cosa podrán encontrar una nota sobre la inminente El Hombre Lobo (con Benicio del Toro haciendo del bicho) y otra sobre Halloween 2. Sí, las escribí yo. La revista viene con DVD de regalo: Cabo de Miedo, la excelente remake a cargo de Martin Scorsese.

miércoles, 6 de enero de 2010

Top Ten x 3


Palpitando el Top 15 de pelis de terror de la década, y por si alguno se los perdió, comparto con ustedes mis tres Top Ten que publiqué en A Sala Llena: uno sobre los estrenos del 2009, otro acerca de los films de la década pasada (incluye bonus track) y un tercero relacionado con el cine argentino de la década.


Top Ten 2006

1. Watchmen: Los Vigilantes: Otra prueba de que un tanque de Hollywood apto para mayores de 18 años, audaz, violento, puede ser redituable comercial y artísticamente. Y tiene uno de los opening credits de la historia del cine.

2. El Secreto de sus Ojos: Juan José Campanella se recibió de leyenda viviente con este gran film con una gran historia y factura técnica y actoral. La secuencia de la cancha de Huracán, de antología.

3. Criatura de la Noche: Una historia de amor entre humano y vampiro, pero sin convencionalismos ni banalidades. Crepúsculo, go home.

4. Bastardos sin Gloria: Trash y dramática al mismo tiempo. Tarantino demuestra estar en plena forma y siempre fiel a sí mismo.

5. 500 Días con Ella: Un testimonio honesto y novedoso de lo que es padecer el amor no correspondido.

6. Up: Una Aventura de Altura: Entretenida, tierna, emotiva. Otra prueba de que Pixar hace todo genial.

7. El Luchador: Mickey Rourke y Darren Aronofsky resurgen de sus cenizas en el mejor trabajos de ambos.

8. Slumdog Millionaire: ¿Quién Quiere ser Millonario?: Cruda y tierna al mismo tiempo, la justa ganadora del Oscar a Mejor Película. Danny Boyle también se recibe de titán del cine.

9. Sector 9: La sorpresa del año. Como todos los grandes exponentes de la ciencia-ficción, es un entretenimiento glorioso —que, además, elude la mayoría de los lugares comunes— y al mismo tiempo hace pensar.

10. Advetureland: un Verano Memorable: Parafraseando a mi colega Tomás Luzzani: “Es casi imposible hacer un soundtrack malo de un film ambientado en los ‘80”. Y Kristen Stewart hace más pareja con Jesse Eisenberg que con Robert Pattinson.



Top Ten de la década

1. Batman: El Caballero de la Noche (2008): Un policial con Batman, en lo que constituye la película definitiva del clásico superhéroe. Heath Ledger y su Guasón, el Mal personificado.

2. Moulin Rouge: Amor en Rojo (2001): El musical de las últimas décadas. Baz Luhrmann es lo más parecido a Dios.

3. Watchmen: los Vigilantes (2009): Junto a Christopher Nolan y J. J. Abrams, Zack Snyder es uno de los más talentosos y audaces directores dando vueltas por Hollywood, y lo demuestra en esta, su obra cumbre.

4. Casi Famosos (2000): La obra maestra del ya genial Cameron Crowe es una suerte de biografía de su juventud como cronista musical.

5. La Llamada (2002): Un ejemplo de cómo una remake supera al original, dejándola como un simple borrador de la escalofriante genialidad que quedó. Junto con El Bebé de Rosemary, El Exorcista y La Profecía, entre otros, uno de los mejores exponentes del cine de terror surgidos dentro de Hollywood.

6. Billy Elliot (2000): Los ingleses pisan fuerte a la hora de hacer comedias dramáticas (o dramas con toques de comedia). Jamie Bell, revelación absoluta.

7. Apocalypto (2006): En esta historia acerca de sobrevivir en los estertores de la cultura maya, Mel Gibson vuelve a demostrar que es uno de los directores con más pelotas. Realismo, crudeza y valentía hechos cine.

8. King Kong (2005): Peter Jackson (otro tipo audaz) dirigió una nueva versión de su película de la infancia, profundizando en la historia de amor imposible. El resultado: uno de los más profundos y a la vez entretenidos trabajos de su carrera.

9. Wall-e (2008): Pixar hace todo bien, pero esta joya sobresale por sus toques arriesgados, aun para un producto destinado mayormente a niños (aunque muy disfrutado por los adultos).

10. Realmente Amor (2003): Historia coral que constituye la película romántica definitiva.

Bonus track: La trilogía de El Señor de los Anillos (2001, 2002 y 2003): La mejor trilogía de la historia, la aventura más épica y la consagración de Peter Jackson.


Top ten cine nacional de la década


1. Nueve Reinas (2000): Del pantano compuesto por el denominado Nuevo Cine Argentino surge esta joyita con una gran historia, realización (¿Por qué te tuviste que morir, Bielisnky?) y actuaciones. Sin dudas, la mejor película argentina de los últimos 25 años.

2. El Secreto de sus Ojos (2009): Juan José Campanella se recibió de leyenda viviente con este gran film con una gran historia y factura técnica y actoral. La secuencia de la cancha de Huracán, de antología.

3. El Hijo de la Novia (2001): Campanella demuestra una mano envidiable para la comedia dramática. Mereció el Oscar.

4. Luna de Avellaneda (2004): Campanella sigue demostrando su capacidad para contar historias sobre personas comunes y corrientes que la pelean día a día.

5. El Aura (2005): Incomprendida segunda —y última— obra de Fabián Bielinsky. Gran exponente del trhiller psicológico, y una de las actuaciones más interesantes e introspectivas de Darín.

6. Un Oso Rojo (2002): Adrián Caetano, Julio Chávez, western urbano=una gran película.

7. Filmatrón (2007): Sin duda, el opus mágnum y la obra más autobiográfica de Farsa Producciones, responsable de películas en extremo divertidas e imaginativas.

8. Crónica de una Fuga (2006): Caetano cuenta un hecho real, transcurrido en una de las peores épocas de nuestro país, pero usando el lenguaje del suspenso y el terror a la manera de John Carpenter.

9. 76 89 03 (2000): Flavio Nardini y Cristian Bernard son los culpables de esta comedia —negrísima, por momentos— acerca de tres amigos obsesionados con una actriz. El cantito que entonan en un momento, demasiado profético.

10. Aniceto (2008): En su regreso a la dirección, Leonardo Favio retoma su film El Romance del Aniceto y la Francisca, pero con una vuelta de tuerca a puro ballet y dramatismo.

martes, 5 de enero de 2010

Gracias por todo, GITANO


A esta altura de la noche ya se dijo todo.
Yo solía tenerlo cerca.
Cursé la secundaria en el Colegio Nacional de Banfield (el CO.NA.BA), ubicado a dos cuadras de su mansión. Pasaba seguido por ahí, pero nunca lo vi. Una vez un auto que entraba, pero el portón se cerró al toque. No sólo en esa época andaba por allí: cada tanto, cuando iba por la zona, pasaba por la puerta. Pero nada.
Ahora sé que no tendré oportunidad de verlo.
Esté donde esté, al menos ya no sufre.

Gracias otra vez.

(Que este no sea otro año tan nefasto como el anterior)