Up

Copio un texto que escribí el año pasado cuando se estrenó Wall-e:

“Dios bendiga a Pixar. La empresa de animación computada, comandada por ese semidios que es John Lasseter, no para de darnos grandes películas. Toy Story y su aún mejor secuela, Bichos, Monsters Inc., Buscando a Nemo, Los increíbles, Cars, Ratatouille, los cortitos que preceden cada largometraje... Incluso las que no llegan a ser maravillas superan con creces a cualquier film actual destinado al público infantil (y no tan infantil). Lo más destacable es que, si bien se preocupan por perfeccionar la animación película a película, en Pixar nunca, jamás, dejan de lado las historias ni los personajes. Recuerden que algunas de las mencionadas joyitas llegaron a competir en los Oscar por Mejor Guión Original. Y es justamente la originalidad lo que caracteriza a estas películas: cuentan cuentos con enseñanzas ya conocidas, pero nos lo dan de una manera novedosa, fresca, ágil, y sin tomarnos por idiotas. Ah, y aún cuando las fuentes de inspiración son reconocibles, no necesitan basarse en ninguna novela, película o serie de televisión de antaño, comic, videojuego, parque temático, etc”.

Todo eso se aplica a Up. Gracias de nuevo, Pixar.

Y a esperar Toy story 3.